Hoy vuelves a despertar con esa sensación,
intentas huir pero te atrapa sin avisar cada madrugada.
Te recuerda a una canción, esos acordes, esa letra…
No es otra cosa que los gritos del fondo de tu corazón.
Te mueves por inercia, sin un estímulo aparente…
Hace días, incluso meses, que se escapó la razón
de esa jaula de cuerdos que se abalanzó sobre tu cabeza.
Cada nuevo paso te acerca un poco más al vacío.
No miras hacia delante, tampoco miras hacia atrás.
Decidiste abandonarte a la suerte, pero ella te abandonó primero.
Intentas rendirte pero no puedes sucumbir.
Te devora el humo del recuerdo que un día te acarició.
Buscas en el camino, el que un día decidiste abandonar.
Sientes el vértigo de hallar la temible solución,
pero fiel a tu filosofía sales a buscarte.
Porque andar perdido es la mejor manera de saber quién eres o eras….
Vértigos y otras Drogas © 2024.
Hecho con mucho amor.